Nº 22 - REGALA UNA VELA, REGALA LUZ

A todos nos encantan las velas perfumadas, que alegran las veladas con su luz y cautivan con su aroma. Pero ¿sabía que las velas representan los 4 elementos de la naturaleza? Simbolizan el vínculo entre la materia y el espíritu y tienen un encanto evocador, capaz de recrear atmósferas íntimas y poéticas. Con su sencillez y delicadeza, una vela aporta luz, calidez y encanto a su entorno. En invierno, cuando son más frecuentes las ocasiones de pasar tiempo con las personas que queremos, las velas encendidas son el toque extra para decorar nuestro hogar y difundir su agradable fragancia.

Una vela es un regalo lleno de significado: además de representar un deseo de luz, esperanza y calor para la vida del destinatario, también es capaz de encender emociones y recuerdos con sus fragancias. Regalarla significa regalar una emoción que vivir, un recuerdo que hacer propio, un nuevo viaje que iniciar. Si ha pensado en una vela perfumada para su regalo, su gesto será sin duda muy apreciado, y más aún si, al elegirla, ha pensado en las características de la persona a la que irá dirigido su obsequio.

Para hacer la elección perfecta, pregúntate para qué podrías utilizarla; cada fragancia puede evocar emociones distintas. Si quieres transmitir sensaciones de alegría y jovialidad, puedes elegir fragancias a base de cítricos; si, por el contrario, quieres transmitir calma y serenidad, piensa en fragancias herbales o mezclas de maderas. Si la persona a la que se lo quieres regalar pasa por momentos de cansancio y te gustaría que recuperase la energía, fragancias frescas y vigorosas como el romero o la bergamota serían perfectas.
Si, por el contrario, quieres hacer un regalo mimador, ¡nada más adecuado que la dulzura de la vainilla!

Ahora, ¡sólo tienes que elegir la vela perfecta para regalar o regalarte!

 

Escrito por Adele.